Nunca he dicho que la palabra enfermedad simplemente se me haya ocurrido. Probablemente, a veces para mi propio perjuicio. Nunca está de más defender lo que es correcto. Sobre todo cuando personas vulnerables necesitan tu voz en temas de justicia social y ambiental. Y el otro día no fue la excepción.

Con camisetas de ALTRI NON y carteles escritos en inglés, cinco amigos impresionantes de Santiago se unieron a mí y a mis amigos de Palas de Rei y Melide para oponernos a la contaminación de nuestro entorno y a la destrucción de la salud y el bienestar de quienes viven, trabajan y caminan por este inmaculado lugar de sensacional belleza natural. Juntos, ¡dijimos NO! a la planta de celulosa de Palas de Rei. Y fue indignante. Permítanme simplificarles la situación.

Parece que ha pasado un año

Apenas tres meses antes, unas cien personas se agolparon en el pequeño salón de plenos de nuestro ayuntamiento para informarse sobre este extraordinario proyecto de una empresa portuguesa que traería casi 500 proyectos a la zona.Más aquí https://www.manuchao.net/news/altri-non En nuestra página web El intercambio se intensificó. La semana siguiente, Altri vino a Melide para presentarnos los beneficios de la celulosa, y el número de asistentes aumentó. Los carteles y pancartas se cuadriplicaron y los líderes de la empresa salieron disparados en medio de la presentación, diciendo que la gente de Melide los hacía sentir mal. La ironía, lo entiendo.

Pasaron tres meses y, mientras tanto, localidades de toda Galicia se organizaron. En pueblos grandes y pequeños se reunieron para ver cómo evitar que esta bomba ecológica destruyera sus comunidades. La mía incluida. ¡Y vaya si lo hicieron!

La plataforma AUlloViva se puso en marcha rápidamente para trabajar con iniciativas y facilitar la comunicación. Seguimos con las redes sociales. La labor de divulgación política logró que ayuntamientos, líderes legislativos, eurodiputados y agentes colaboraran con nosotros. Se crearon estrategias políticas al invitar a ecologistas a hablar con los ciudadanos de cada localidad para educarles sobre las consecuencias para ellos, sus fincas, comunidades y fuentes de ingresos. Una delegación viajó a Bruselas, al Parlamento Europeo y al Congreso en Madrid, para solicitar ayuda y concienciar sobre esta zona y sobre el monstruo empresarial que se nos viene encima. Y la gente empezó a prestar atención. Era hora de alzar la voz.

No nos vamos a quedar de brazos cruzados

Ayer, una presentación organizada en Palas esperaba 4000 personas. Como solo vivimos 3385 personas en el Concello de Palas de Rei, de las cuales Jeff y yo somos solo dos, sabíamos que algunas personas de Melide y Monterroso también se unirían. Pero nada nos preparó para la enorme afluencia de personas de toda Galicia. Veinte mil personas vinieron a nuestro pequeño pueblo y, según el periódico, se desplomaron en la carretera entre Arzúa y Palas de Rei. La fila de coches se extendía kilómetros. Y cuarenta autobuses trajeron a gente de toda la comunidad. Desde aquella primera reunión de cien personas en nuestra Casa de Concello, hasta veinte mil ciudadanos que renunciaron a su domingo y condujeron durante horas para protestar contra esta fábrica, es algo absolutamente excepcional. Y nosotros estábamos entre ellos.

Ahí están Tricia y Matilde con nuestro cheque en inglés

La noche anterior, hice carteles para que nos detuviéramos y los escribí en inglés. Jeff cuestionó la sensatez de ese método, pero le dije que la prensa de aquí los descubriría de inmediato. Serían una anomalía en un mar de carteles. Abrieron el ruido. Y funcionó. Salimos en los periódicos. También la mejor prensa que ha apoyado esta fábrica.

Peregrinos Auténticos Defienden a los Gallegos

El otro día, nos dieron la mano y nos dieron las gracias por ayudarnos. Mis amigos estadounidenses y gallegos quedaron impresionados. Nuestros carteles que mostraban que los peregrinos estaban allí para ayudar a los ciudadanos recibieron tanto cariño que lloré mientras una mujer, al conducir, me lanzaba besos. Si logramos que más peregrinos se unan a nuestra próxima protesta, sin duda significaría mucho para la gente de aquí.

He estado gritando esto a los cuatro vientos desde el principio. Las voces de los peregrinos estadounidenses son importantes para el gobierno y para la gente. Mi publicación en Facebook pidiendo a los Peregrinos Americanos del Camino, la mayor organización de peregrinos estadounidenses, que nos ayudaran, fue eliminada por ser demasiado política. ¿Cómo es que proteger el Camino y a su gente, incluyéndome a mí, es demasiado político? La gente de Galicia no lo cree. ¿Comprende APOC también el país que atraviesan? El tramo del Camino Francés de Sarria a Santiago es, con diferencia, el más transitado para los estadounidenses y sin duda será devastado por esta fábrica de celulosa. Y todas las cafeterías gallegas que ofrecen café, agua y comida a estos peregrinos, o que limpian su albergue o pensión, se están movilizando y se apresuran a proteger la salud, la vida y los ingresos de sus familias. Ayúdennos. ¿Somos los que vivimos aquí solo compañía para los peregrinos estadounidenses en el Camino? ¡No! No creo que los miembros de esa organización digan eso, porque hablé con algunos ayer mismo en Palas cuando leyeron nuestros carteles. Pregúntenles a los verdaderos exploradores que aman esta zona de todo el mundo. La buena noticia es que algunas organizaciones de exploradores más valientes han resistido y estamos inmensamente agradecidos.

La marea está cambiando

Los periódicos y las televisiones subvencionados por el gobierno han publicado anteriormente noticias mayoritariamente positivas sobre Altri. Manteniendo la posición de los gobiernos locales sobre la fábrica portuguesa y dejando de lado a unas pocas personas en lugar de crear empleo. Sin embargo, parece haber una fractura en esa fachada. El lenguaje actual es intrigante hoy.

¿Una bestia que mastica eucalipto y dice que un pequeño grupo de ciudadanos dedicados no puede transformar la narrativa ni transformar el mundo?

Después de despedir a mis maravillosos amigos (gracias, Lois, por traer al equipo desde Santiago), después de comer en el restaurante de nuestros amigos Conchi y Fran en Melide, los cerebros detrás de la iniciativa UlloaViva, pasé por la casa de mi amiga y vecina, Chusa. Estaba abarrotada y gritó de alegría al verme y me abrazó con lágrimas en los ojos.

¡20.000! ¡Lo logramos, Kelli!

Hubo sonrisas en todo momento. De verdad, no he hecho nada comparado con esta gente. Pero esto es solo el principio. La primera protesta fue aquí mismo, en Palas de Rei, donde seguramente se ubicará la mayor fábrica de celulosa de Europa. La próxima manifestación será en Pontevedra, donde el mercurio y una multitud de otros productos químicos y contaminantes permanentes fluirán desde la fábrica de Altri, que se encuentra abajo, hacia la ría de Arousa, arruinando así la comunidad a lo largo de los 100 km de ruta. Si te gusta el pescado y el marisco gallego, las vieiras, etc., sin duda lo apreciarás. Si Altri entra, yo me negaría a comer marisco de Galicia. Y además, los 4.000 trabajadores de la industria pesquera y marisquera de Pontevedra están en peligro.

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